domingo, 27 de marzo de 2011

San Silvestre 2010 Valencia

30 de Diciembre de 2010. Da la casualidad que es jueves, por lo que trabajamos hasta las 19:00 horas. La carrera comienza a las 20:00 horas, por lo que no teníamos mucho tiempo para pensarlo. Y como lo prometido es deuda, el año pasado dijimos que para la siguiente nos organizaríamos para ir disfrazados todos de lo mismo, y así días previos decidimos disfrazarnos todos de bebés. ´ Así que quedamos todos en la oficina de Pintor Sorolla para reunirnos allí y poder cambiarnos. Eva, que había quedado con Esmeralda, acudieron directamente a la oficina y yo cuando cerré la de Fdo.Católico acudí allí. No me encontraba bien, pues tenía un dolor en el pecho que no me permitía respirar bien, pero dado que tampoco íbamos a batir ninguna marca, seguí con la prueba. Antes de salir hacia la Pza.del Ayuntamiento


Así que nos acercamos a la plaza para situarnos en la zona de salida. De esta forma Pepe, Dioni, Luis, Raquel, Eva, Esmeralda, Alec, Vera, Paula , Paula y Lucia llegamos a la zona de salida, donde una gran multitud de gente disfrazada estaba ya a la espera de iniciar la prueba. A las 20:00 horas dió inicio la prueba, y desde que comenzó hasta que pasamos por debajo del balcon del Ayuntamiento pasaron prácticamente 6 minutos. Nada más pasar la línea de meta todos comenzamos a correr, y antes de llegar a la curva donde está la Estación del Norte, nos fuimos separando. Pepe se quedó con Alec, Eva con Paula y Esmeralda, Raquel con Lucia y Dioni, Luis con Paula y yo con Vera. A la altura de la calle del Hospital en Guillém de Castro fuimos junto a Pepe y Alec, hasta que nos adelantó Bob Esponja, y Alec se fue como loco detrás de él. En ese momento nos alcanzó Eva y fuimos un rato juntos, entre andando y corriendo. A la altura de las Torres de Serrano me encontré con Luis, Paula y Lucía, y ya fuimos todos juntos hasta la meta.




En ésta ocasión no cronometré la prueba, dado que me dejé el reloj en casa. A pesar del dolor de pecho, que me dió un poco de agobio en la prueba, nos lo pasamos genial y nos reímos un montón. Nos reunímos como siempre en el banquito que hay en la plaza enfrente del arbol de Navidad, y de allí a la oficina a cambiarnos.